Como almacenar comida en la nevera
Trucos y consejos para almacenar correctamente los alimentos en la nevera
¿Para qué sirve guardar comida en la nevera?
El frío ayuda a prevenir el crecimiento de bacterias y otros microbios que pueden deteriorar la comida y provocar enfermedades. Las neveras tienen distintos compartimentos con distintas zonas de temperatura que sirven para varios propósitos. Aprendiendo algunas técnicas básicas de almacenamiento, conseguiremos guardar nuestros alimentos de forma saludable y segura.
Características de los estantes de la nevera
Aunque las neveras deberían estar a 4ºC, la temperatura va a variar en sus diferentes partes en función de su proximidad con el elemento refrigerante. Así pues, las puertas son la parte más cálida de la nevera, y están sujetas a altas fluctuaciones de temperaturas. Éstas deberían reservarse para los alimentos más resistentes al deterioro, como condimentos, zumos, mostaza, salsa de tomate, mantequilla y otros productos que pueden sufrir cambios de temperatura.
Guarda la mantequilla en la puerta del frigorífico. Es uno de los alimentos que puede aguantar ligeras variaciones de temperatura.
Los estantes
superiores de la nevera tienen una temperatura muy constante. Esto lo convierte
en el espacio ideal para almacenar las sobras, bebidas, comida empaquetada y
productos listos para el consumo como el hummus, embutidos y ensaladas ya
preparadas. Al estar en el estante superior, también supondrá estar lejos de
los productos crudos, y que las bacterias no se transfieran de los productos no
procesados a los ya procesados o cocidos.
Los lácteos como
leche, yogures, quesos, y los huevos y embutidos pueden guardarse en los
estantes del medio, ya que no requieren tanto frío como otros productos.
Los estantes inferiores son la parte más fría de la nevera. Esta es la parte idea para la carne cruda, pescados, mariscos y lácteos que requieran bajas temperaturas. La carne y el pescado crudo deberían ser envueltos o en un contenedor sellado para evitar el contacto con otros productos o afectar otros productos. De esta forma, evitamos que la carne quede seca al contacto con el aire, la oxidación, rancidez, y por encima de todo, la contaminación por exudados frecuentes de carnes y pescados.
El pescado y carne crudos, deben ser almacenados envueltos o en un recipiente cerrrado
Las frutas y verduras deben guardarse en los cajones disponibles en la nevera para su conservación, donde la temperatura es mayor. Las temperaturas bajas, en contraste con la carne y el pescado, puede deteriorarlas. Los vegetales deben guardarse en distintos cajones, separados en función de sus características. Dependiendo de variables como la actividad respiratoria, humedad relativa y emisiones de etileno, se almacenarán en bolsas o libres.
Las frutas y verduras tienen sus propios espacios en la nevera, ideales para su conservación
Los alimentos deberían consumirse siguiendo el criterio "el que primero caduca, primero se consume", atendiendo a una vida útil limitada, como en el caso de productos perecederos o alimentos con una fecha de caducidad determinada. Por lo tanto, la carne
picada, la carne de aves de corral, y en general el pescado pueden mantenerse hasta
dos días. Bistecs y ciertos cortes de carne para asar pueden mantenerse hasta cuatro días, así
como los alimentos del grupo anterior ya cocinados.
Otras recomendaciones generales:
- Deja espacio entre productos, y entre el fondo y los lados de la nevera. De esta forma, el aire frío podrá circular y la distribución de temperatura no será restringida.
- Las latas, una vez abiertas no deberían guardarse nunca en la nevera, sino en un envase que pueda ser refrigerado. Así evitaremos la contaminación química.
- Deja que las sobras se enfríen antes de guardarlas en la nevera, para no subir la temperatura global del refrigerador.
- Evita abrir la puerta de la nevera muchas veces, para evitar fluctuaciones por la salida de aire frío y la entrada de aire caliente.